viernes, 11 de abril de 2014

Serguéi Prokófieff: Sinfonía nº 5 en si bemol mayor, op. 100

Orquesta Filarmónica de Rotterdam
Yannick Nézet-Séguin, director

Prokófieff compuso su Quinta Sinfonía en el verano de 1944 catorce años después de completar la Cuarta y en plena Segunda Guerra Mundial.
En palabras del autor se trata de "un himno para un hombre libre y feliz, a sus maravillosos poderes y a su puro y noble espíritu". Y añade "No puedo decir que haya escogido deliberadamente este tema. Nació en mí y me pedía expresión. La música maduro dentro de mí. Llenó mi alma".

La obra está dividida en cuatro movimientos:
I. Andante (en si bemol mayor)
II.   Allegro marcato (en re menor)
III.  Adagio (en fa mayor)
IV.  Allegro giocoso (en si bemol mayor)

El primer movimiento representa lo que Prokófieff visualizaba como la gloria del espíritu humano. En una discutible forma sonata, presenta y desarrolla dos temas - uno tranquilo y sostenido, y otro elevado con acompañamiento tremolo de las cuerdas. Representa la cima del pensamiento sinfónico de Prokófieff. El movimiento concluye con una coda electrificada, puntuada por un rugiente gong y trémolos en el registro bajo del piano.
El segundo movimiento es un scherzo insistente en el típico modo toccatta, empleado con frecuencia por Prokófieff. Su parte central es una sección en forma de danza popular en compás ternario.
El tercer movimiento es plácido y soñador, lleno de nostalgia, que sin embargo se transforma en un torturado clímax antes de regresar al ensueño.
En el finale un coro de cellos toca una introducción lenta basada en elementos del primer tema del movimiento inicial. Posteriormente se lanza el finale propiamente dicho, un rondó. El divertido tema principal contrasta con dos episodios más calmados, uno a cargo de la flauta, el otro −un coral− en las cuerdas. Cuando el movimiento va a concluir en un tono victorioso, la música repentinamente degenera en una locura frenética, que es interrumpida por un cuarteto de cuerdas tocando staccato "notas equivocadas" con violentas interjecciones a cargo de de las trompetas, lo que hace que el último acorde en si bemol mayor suene completamente irónico.
La obra está instrumentada como sigue:
Piccolo, 2 flautas, 2 oboes, corno inglés, clarinete alto, 2 clarinetes, clarinete bajo, 2 fagotes, contrafagot, 4 trompas, 3 trompetas, 3 trombones, tuba, timbales, bombo, redoblante, platillos, triángulo, pandereta, gong, caja china, piano, arpa y cuerdas (violines I y II, violas, cellos, contrabajos)
El estreno tuvo lugar el 13 de enero de 1945 en la Gran Sala del Conservatorio de Moscú por la Orquesta Sinfónica Estatal de la URSS dirigida por el mismo Prokófieff. La obra fue bien recibida y esta Quinta Sinfonía es una de las principales del compositor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.