sábado, 9 de marzo de 2013

Wolfgang A. Mozart: Concierto para trompa nº 4 en Mi bemol mayor, KV. 495


III. Rondo: Allegro vivace
Jozef Kopelman,trompa
Staatskapelle de Dresde
Milos Stevove, director

El Rondó es una forma musical en la que hay un tema principal que se repite y entre cada repetición hay un tema que contrasta con él:  A B A B A   o    A B A C A... etc. La repetición del tema principal, también llamado estribillo (o ritornello) le da unidad a la obra; los temas contrastantes (episodios o estrofas), mantienen el interés del oyente.

A diferencia de los conciertos barrocos en los que se alterna la parte solista con la orquestal, en los conciertos de Mozart ambas partes se combinan para formar un todo. Sus cuatro conciertos para trompa fueron decisivos para la aceptación de este instrumento como solista.
Los cuatro Conciertos, y el Rondó para trompa y orquesta que compuso Mozart fueron dedicados al trompista Ignaz Leutgeb. Como era frecuente en el caso de muchos de los intérpretes del siglo XVIII, los detalles de la vida de Leutgeb no se conocen con demasiada exactitud. De cualquier forma, se sabe que Leutgeb fue compañero de Mozart en Salzburgo, donde participaba en la orquesta de la corte como trompista. Es indicativo de la excelencia de Leutgeb como intérprete de la trompa el hecho de que viajara a París durante ese año para presentar al menos  dos conciertos, ambos recibidos con gran éxito.
En 1777 Leutgeb renunció a su posición en la orquesta de Salzburgo y se fue a Viena. Cuando Mozart se trasladó a Viena en 1781 ambos se volvieron a encontrar. Leutgeb le pidió a Mozart que compusiera un concierto para él.

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